El Priorat es tierra de gran tradición vinícola y por ello es fácil encontrar bodegas que destinaban el vino elaborado a la cooperativa del pueblo, para consumo familiar o bien lo comercializaban a granel. Puede que alguno de vosotros tenga algún recuerdo de sus abuelos o padres yendo a tienda o directamente a la bodega del pueblo a comprar las garrafas del vino que consumiría en casa durante la semana.
Una de estas tradicionales bodegas prioratinas es
Sangenís i Vaqué, ubicada en la plaza Catalunya de la localidad de Porrera. Fue
creada en el año 1978 por el matrimonio Pere Sangenís y Conxita Vaqué, que
decidieron llevar a cabo un proyecto común aunando una antigua bodega y unas fincas
recibidas de sus respectivas familias en herencia. Cultivan las variedades
autóctonas garnacha y cariñena y en menor medida syrah, cabernet y merlot. Su
principal actividad comercial era la venta a granel hasta que en 1995 fueron
pioneros en Porrera y empezaron a embotellar parte de su producción de vino.
Actualmente en Sangenís i Vaqué conviven dos
generaciones de la familia: Pere Sangenís, fundador de la bodega, y Maria y
Núria Sangenís, hijas de Conxita y Pere que se incorporan en el año 2006 como
enóloga y administrativa, respectivamente. Una buena combinación de experiencia,
tradición, conocimiento, juventud, innovación y modernidad. María fue la
encargada de hacernos la visita pocos días antes que cogiera unos días de
merecidas vacaciones. Le agradecemos la deferencia de llevarnos por sus viñedos
y poder sentir bajo los pies la tierra de llicorella tan característica de la
zona, disfrutar de preciosas vistas de Porrera y conocer de primera mano cómo
cuidan y trabajan la tierra.
Ya en la bodega, María nos explicó el proceso de
vinificación que siguen y que empieza con la fermentación alcohólica en
depósitos de cemento revestidos de gres original. Son en total seis cubículos
de unos 130 años de antigüedad que cuentan con diferente capacidad y están
repartidos por la planta baja de la bodega. Pere decidió mantener estos
depósitos ya que en ellos preservan de mejor manera la fruta procedente de la
variedad. Estos depósitos, de 50 y 100 Hls. son ideales para la fermentación alcohólica
y maloláctica, y asépticos gracias al relleno de epoxy en las juntas. En la primera planta han dispuesto la sala de
barricas formada principalmente por unas 200 botas, de 225 litros de roble
francés y algunas de roble americano tratado en Francia, y que tienen como objetivo
estabilizar el vino que reposará en ellas como mínimo 12 meses. Aquí llega el vino separado por variedades
excepto la garnacha y cariñena, que se ensambla con anterioridad.
En la degustación probamos todos los vinos que
integran su gama. Cinco tintos, un vino blanco y un vino dulce. Su filosofía de
vinificación mantiene la idea que hay que dejar al vino evolucionar tanto en la
barrica como en la botella. Por eso, sus vinos tintos permanecen como mínimo
tres años en la bodega antes de su salida al mercado:
LO COSTER BLANC 2012: único vino blanco de la bodega y proyecto personal de Maria Sangenís de producción muy límitada, unas 300 botellas. Elaborado con las variedades de garnacha blanca y macabeu (de Porrera y Torroja) y crianza en barricas nuevas de roble francés durante 8 meses. Vino de color amarillo paja, propio de la crianza en bota. Blanco con alta personalidad en nariz, recuerda a las avellanas tostadas en boca.
SANGENÍS I VAQUÉ 2008: vino tinto elaborado con garnacha, cariñena y algo de syrah. Presenta una buena estructura y la mineralidad típica del terroir de la zona. No pasa por barrica.
DARA 2008 y 2009: vino tinto elaborado con garnacha, cariñena y merlot (45% - 45% - 10%) y 12 meses en barrica. Mientras que en la añada 2008 predomina la mermelada, algo de anchoa y escalibada en la 2009 hay una tanicidad lateral, con aromas más terciarios, fruta fresca y notas de vainilla.
VALL POR 2004: vino tinto elaborado con garnacha, cariñena, cabernet y merlot (35% - 35% - 15% - 15%). Muy directo en boca y con un largo posgusto.
CORANYA 2011: vino tinto elaborado con garnacha y cariñena. Un 50% descansa en barrica nueva y el resto en barrica de segundo año del vino Monlleó. También tiene algo de barrica de roble americano. Potencia, elegancia, suavidad y sedosidad en boca, con larga acidez y notas de toffe y café.
CLOS MONLLEÓ 2000: vino tinto elaborado con
cariñena y garnacha (50% - 50%) de viñas viejas y en barrica nueva de roble
francés. Mayor volumen en boca, taninos de fruta, largo, con estructura,
potente. Presenta notas de tabaco y chocolate fino.
SIMFONIA EN DOLÇ: vino dulce natural elaborado con garnacha y cariñena deshidratada (90% - 10%) vendimiada en septiembre de 2007 y 2009. Suave concentración de aromas, ideal para adentrarse en el mundo de los vinos dulces. Se presenta en un precioso y acertado packaging.
Sangenís i Vaqué es una bodega del Priorat tradicional
e integrada por una sencilla familia que siente un gran respeto por lo que
hace. Tiene un gran presente gracias a los vinos nacidos de la mano de Pere
Sangenís y un gran futuro con Núria y Maria, que trabajan por un lado
respetando y manteniendo la tradición y por otro, lanzando nuevos vinos que
amplían la imagen de la bodega hacia nuevos mercados.
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