En los últimos meses hemos ido a varias
ferias de vino y quisiéramos compartir contigo nuestras experiencias y
opiniones:
El primer fin de semana de mayo viajamos
hasta la comarca del Priorat, atraídos por la multitud de propuestas culturales
de catas de vino, visitas, gastronomía, etc., que se habían programado para los
días del 26 de abril al 7 de mayo.
Empezamos nuestra experiencia enoturística el
viernes 4 de mayo en la IV Cata de
Cariñenas que se celebró en Porrera. Un evento que nos gustó mucho por su
originalidad, encanto e informalidad. En la planta baja de la casa de payés Cal
Porrerà se dieron cita 17 bodegas de la zona para presentar los vinos que
elaboran sólo con la variedad de uva cariñena. Entre los varios vinos que
bebimos nos quedamos con los siguientes (el orden no sigue ningún criterio):
- Empit Selecció 2011 de la bodega Castellet: afrutado, especiado, con buen paso por boca y con potencial (15 – 18 euros).
- Ferrer Bobet Selecció Especial 2010 de la bodega Ferrer-Bobet: meloso, potente en boca, tabaco, chocolate, flores. La enóloga Isabel Fortuny lo había extraído ese mismo día de la bota después de una crianza de 17,5 meses. ¡¡¡Si nos conoces un poco ya sabrás que esta es una de nuestras bodegas favoritas!!! (50 – 55 euros).
- Clos Dominic Vinyes Altes 2010 de la bodega Clos Dominic: licoroso al principio y chocolate después, madera equilibrada (35 – 40 euros).
- Herència del Padrí 2010 de la bodega Domaines Magrez: licoroso, especias, buen paso en boca, largo post-gusto, madera bien integrada (25 – 30 euros).
Para poder aguantar bien la
noche y no morir en el intento, nos sirvieron un catering formado
principalmente por embutidos y fritos. Cuando la cata estaba bastante avanzada
trajeron comida algo más elaborada. Recomendamos que para próximas ediciones
empiecen pronto a servir y que traigan antes los platos más elaborados porque ¡¡bandeja
que servían bandeja que volaba!! Fue una fantástica noche, con una temperatura muy
agradable que te invitaba a tomar el fresco y a disfrutar del vino y de la
gente con todos los sentidos.
Después de pasar la noche en
Reus, ya que los alojamientos por la zona de Falset estaban por las nubes, nos
fuimos a la Fira de Vins de Falset que estaba abierta de las 11h a las 21h.
Llegamos de cara al mediodía y aparcamos en el antiguo campo de fútbol
que se habilitó como parking. ¡¡¡Nos fue por los pelos porque enseguida se
llenó!!! La calle Miquel Barceló fue el lugar que albergó los stands de las 50
bodegas de las DO del Priorat y Montsant y fue todo un acierto. Se podía
caminar ampliamente por el recinto y había bastantes sillas y mesas para beber
los vinos y comer lo que llevaras tranquilamente.
Se pusieron a
la venta dos tipos de tiquets: uno de 9€ (copa Riedel + 5 consumiciones) y otro
de 6€ (5 consumiciones). Cada año se destina una parte de la recaudación a
causas solidarias. En esta edición, se destinaron 0,50€ a la Asociación de
Disminuidos Montsant. ¡Una acción muy loable!
Al final
probamos entre los dos 12 vinos y sólo gastamos 7 consumiciones. ¿A que no te
salen las cuentas? ¡Cierto! La mayoría de los stands no nos querían coger las
consumiciones para que tuviéramos la oportunidad de probar más vinos y opinar.
Una muy buena táctica comercial, ¡sin duda alguna!
Tienes varias
opciones para comer en Falset en la misma calle Miquel Barceló: desde bares que
ofrecen platos combinados y tapas hasta restaurantes de buena calidad como el
del Hostal Sport, El Celler de l’Aspic o Quinoa.
¡La Fira del Vi
de Falset ha sido un gran descubrimiento! Nos ha dejado con ganas de volver y
dedicarle más días para asistir a las catas de gran calidad que organizan y
conocer más los pueblos y la geografía del Priorat.
0 comentarios:
Publicar un comentario